Nuestro intestino produce hormonas y neurotransmisores, sustancias responsables de las actividades del cerebro y modulan las emociones.
Una dieta basada en los vegetales, las frutas, hortalizas, semillas, Legumbres y frutos secos aumentan la síntesis de las moléculas relacionadas directamente con el buen humor, como son la serotonina, la melatonina, la dopamina la noradrenalina.
Estas dietas ayudan a prevenir la depresión, relacionada con inflamaciones crónicas.
Como la carne es pro inflamatoria, debemos reducir su consumo y reemplazarlos por alimentos ricos en omega 3, con un alto poder antiinflamatorio, como el salmón, pescado azul , atún y las sardinas.
Los carbohidratos son importantes por su alto contenido en glucosa, un nutriente esencial para el funcionamiento cerebral.
Evitar las grandes cantidades de comida que generan llenura y un sentimiento de culpabilidad. Se recomienda comer en un ambiente tranquilo, masticar lentamente disfrutando del sabor y olor de las comidas alcanzando la saciedad y digestiones menos problemáticas.
Alimentos que aumentan nuestra felicidad:
- Cacao sin azúcar semillas
- frutos secos, verduras
- frutas, alimentos ricos en omega 3 como semillas de chía
- lino
- pescados, sardinas y anchoas
- huevos ecológicos
- carne en pequeña cantidad
- aguacate
- aceite de oliva
- agua
La deshidratación causa cefalea, baja de tensión y falta de concentración.
Hay alimentos que son nocivos como los azucares, jugos azucarados, bebidas con gas, grasas trans, aceite de palma, cereales azucarados al desayuno, bebidas con alcohol, hamburguesas, pizas, perros calientes, exceso de sal y el glutamato mono sódico como conservante de alimentos. Estos alimentos y conservantes se deben evitar, tratando de cambiarlo por algunos mas sanos.
Por Dr. Pedro Suarez